El desarrollo del partido fue bastante parecido a todos nuestros partidos CONTRA RIVALES CHOTOS: es decir, esperando atrás y jugando ordenados en el PT y desordenados y queriendo hacer nuestro gol en el ST.
Es como si perdiéramos la concentración y nos ganase la ansiedad. Es como querer acabar antes de ponerla, no sé cómo explicarlo. Cuando vemos que tenemos superioridad corremos para adelante, no damos nunca la vuelta, y nos resulta imposible replegarnos.
Por otro lado, cuando el rival se nos viene encima y nos toquetea en mitad de cancha, ES NORMAL, NO SE DESESPEREN, ES LA IDEA. Si el rival va perdiendo, es lógico que se nos venga encima.
QUE VENGAN, QUE NOSOTROS VAMOS A MARCAR. QUE LA MUESTREN, QUE LA PISEN, QUE NOSOTROS LOS ESPERAMOS LEJOS DEL ARCO.
No gritemos como locos, es obvio que nos van a atacar. Nos replegamos y listo.